Emociones: impulsos a los que reacciona nuestra mente

Ésta vez daré mi opinión sobre lo que es la Inteligencia Emocional, porque es algo muy importante que creo que se debería de tocar desde chicos y no ya cuando las personas tienen problemas que no saben cómo resolverlos y recurren a los extremos, casos desde bullying y maltrato familiar. Estas cosas cambian radicalmente la manera de pensar de un niño y comenzamos con los problemas mentales por inseguridad o nos empieza a ganar el miedo a hacer o decir cosas.

La estabilidad emocional siempre ha sido fundamental para cualquier tipo de situación, saber cómo los grandes deportistas sobresalen a un fracaso, un empresario a la quiebra, líderes virtuosos y casos de éxito. Todos tienen que ver con la fortaleza mental de la persona y claro las ganas que ella tenga de salir adelante.El estar en paz contigo mismo tiene mucho que ver con la manera en la que piensas y percibes las cosas. El poder de analizar la situación desde un punto de vista que incluya la mejor solución pero a la vez te dé tranquilidad de lo sucedido, controlar el estrés del trabajo, un mal día, todo tiene que ver con la inteligencia emocional. El término “Inteligencia Emocional” fue acuñado por el famoso psicólogo Daniel Goleman, quien lo dio a conocer a través de su best seller “Inteligencia Emocional” en 1995, puntualizando temas de importancia para conocer cómo llegar a lograr un control de tus emociones. Es un libro que he leído y que se los recomiendo muchísimo si quieren tener un panorama amplio sobre lo que incluyen y conllevan las emociones.

La meta de este libro consiste en comprender el significado y el modo de dotar de inteligencia a la emoción.Desde técnicas muy básicas como una de las más mencionadas: tender tu cama para sentir cómo te empoderas desde que inicias tu día, el sentir que tienes el control de tus acciones y generar esa confianza en ti, hasta llegar a hacer complejos pasos para una meditación más profunda, exigiendo a tu cuerpo un control de la situación que él mismo está creando y tener la concentración para dejar tu mente en blanco, porque para ver más allá hay que calmar el ser. La mente emocional y la mente racional, muy distintas pero enlazadas a la hora de operar una situación, pueden fungir como vertientes ante un problema. Cuanto más elevada es una emoción menos control tiene la mente racional sobre la situación. Las emociones son impulsos a los que reacciona nuestra mente para actuar de una u otra forma, entonces podemos pensar que una emoción como la ira nos ocasione que el ritmo cardíaco se eleve, aumente la adrenalina, la sangre corra con más facilidad a las manos y nos haga reaccionar a tomar algún objeto para defendernos o agredir a la persona del conflicto; que la felicidad nos haga entrar en empatía con las personas, acceder a una conversación, inhibir los sentimientos de tristeza, logrando automotivarse para salir adelante a una situación, segregar serotonina, dopamina, por alguna situación de felicidad sobre algún logro cumplido o un encuentro sexual placentero, ayuda para estabilizar los niveles de estas distintas sustancias que se encargan del desarrollo de las emociones.

Entonces podríamos tener mejor desempeño en cualquier actividad de nuestro día, tener energía, creatividad, entusiasmo y podríamos salir adelante con la mejor postura ante cualquier situación. Pero, al igual que un músculo, el cerebro también se estimula y para eso también hay que practicar.

Hacer a las personas más empáticas a otras, a los animales, a las tragedias, a los desastres naturales, a la desgracia ajena, para crear una visión distinta de esa misma persona conforme a las situaciones que se viven en su entorno, la necesidad de ayudar a otra persona en problemas, el adoptar un perro callejero, cualquier acto de bondad atrae una gran enseñanza a cada persona, porque no hacer que estas habilidades se desarrollen desde un principio y puedan ser mejoradas y utilizadas para cambiar a más personas.

Deberíamos empezar a tomar en cuenta un cambio de enfoque en las escuelas y agregar materias que tengan que ver con habilidades más humanas, valores y cuidado del medio ambiente, talleres de emprendimiento o coaching personal, ayuda personalizada con psicólogos. Creo que hay muchas cosas que podríamos mejorar para poder tener personas con más conciencia sobre lo que vino a hacer a este mundo.

Espero reflexionemos sobre qué cosas importan en verdad en la vida, tu familia, tus amigos y seres queridos, un momento, un recuerdo, una foto o el ego que te hace pensar que mereces cosas por no sentirte menos en una sociedad que nos dice que importa más la marca de tu ropa que la cicatrices que tienes.